Las amantes del maquillaje sabemos lo engorroso y aburrido que puede ser ponernos a limpiar todas nuestras brochas. Por eso, es importante retirarles el producto trás cada uso y evitar que se acumulen los pigmentos en ellas.

Hoy voy a contaros como hago mi limpiabrochas casero, solo necesitaremos unos pocos productos que seguro que tenéis en casa. Vamos allá!

INGREDIENTES:

• Agua destilada. (Se utiliza para distintos electrodomésticos como la plancha)
• Champú o jabón, intenta que sea sin colorantes ni perfumes añadidos, cuanto más natural sea menos maltrataremos nuestras herramientas.
• Acondicionador capilar.
• Alcohol 70%.

Una vez tengamos listos los ingredientes tomaremos un vaso/taza de medida estándar para mezclarlos en la siguiente proporción:

1. Llenamos la taza con el agua destilada, es importante que no sea agua “del grifo” para evitar cal y otros componentes que estropearán el pelo de nuestras bochas.
2. Añadimos una cucharada de champú, una de acondicionador y otra de alcohol. Con estos ingredientes conseguimos limpiar, suavizar y desinfectar los pinceles.
3. Removemos todo hasta quedar diluido de manera homogénea y lo vertemos en un dispensador que nos sea cómodo de usar, en mi caso utilizo pequeños botecitos con formato spray.

Y listo! Solo necesitarás un poco de papel de cocina y podrás limpiar tus brochas moviéndolas en pequeños movimientos circulares sobre la parte humedecida. Sabrás que están limpias cuando dejen de desprender color y el papel se vea limpio.

Así conseguiras evitar infecciones, la aparición de granitos y que no se te estropee el maquillaje con colores utilizados en ocasiones anteriores.

No te preocupes si el pelo de las brochas (en especial las de color blanco) sigue viéndose colorado, este tono no desaparecerá hasta que las hagas la limpieza “profunda” semanal con agua y jabón.

Así de fácil! Vosotras también utilizáis limpiador de brochas? Cuál es vuestra marca favorita? Dejármelo en comentarios, me encantará leeros!