Edad Media:
La Edad Media, Medievo o Medioevo es el período histórico de la civilización occidental comprendido entre los siglos v y xv. Convencionalmente, su inicio se sitúa en el año 476 con la caída del Imperio romano de Occidente y su fin en 1492 con el descubrimiento de América, o en 1453 con la caída del Imperio bizantino, fecha que tiene la singularidad de coincidir con la invención de la imprenta —publicación de la Biblia de Gutenberg— y con el fin de la guerra de los Cien Años.
La ciencia medieval no respondía a una metodología moderna, no había conexión con el mundo de las técnicas, que estaba relegado al trabajo manual de artesanos y campesinos, responsables de un lento pero constante progreso en las herramientas y procesos productivos.
La estética medieval era principalmente teológica: la belleza estaba al servicio de la revelación, sirviendo para expresar las verdades cristianas. Lo que derivaría en la arquitectura, moda, belleza y estética social.
Estética y belleza:
Durante este periodo denominado EDAD MEDIA, el cuidado personal llegó a ser indigno y ofensivo. Debido a la gran influencia de la iglesia católica en la sociedad de la época y mitos médicos a día de hoy totalmente refutados.
El ideal de belleza que imperaba en la Europa medieval, estaba muy presente y de forma muy clara en la literatura que se inclina hacia la temática del amor cortés. Se abandona el aspecto más “recargado” de sus predecesoras romanas para buscar un look que se relaciona directamente con la imagen de la mujer más perfecta: la Virgen. La mujer ideal tenía que tener la piel pálida y cuerpo curvo, el cabello rubio con frente despejada, las mejillas y los labios rojos, y las cejas poco pobladas y negras. Una imagen sencilla.
La mujer permanecía recluida en casa y tapaban la cabeza con tocados en señal de sumisión.
La doctrina cristiana medieval va a tener una visión muy negativa, tanto del maquillaje como de cualquier adorno personal. Como método de ruptura con la estética romana anterior, y como defensa de la modestia. El cuerpo habría sido creado perfecto al estar hecho a imagen y semejanza de dios, de modo que no seria necesario modificarlo ni añadirle nada.
El maquillaje se entendía como método de atracción para los hombres, y se relaciona de forma directa con la prostitución y la mentira en general, por presenta una visión del propio cuerpo que no se corresponde con la realidad.
Sí se permitía el maquillaje y el adorno, para atraer a un hombre si sólo lo hacía con intención de desposarse o cuando se trataba de acudir a una celebración.
Cosméticos:
Perfumes y aceites eran de uso común para mujeres y hombres de muy distintos estratos sociales.
Métodos para blanquear la piel: zumo de fresas, frotarse el rostro con un cristal de amatista húmedo, mezcla de raíces de lila, harina de trigo (se dejaba en remojo durante quince días formando un polvo). A finales del periodo se empiezan a utilizar otros productos, tóxicos en su mayoría, como el arsénico.
Para los labios y las mejillas se utilizaban polvos rojos, vino, cera de abeja y bálsamos. El cabello va a tender también a un color rojizo, ya que los tintes de origen vegetal que se utilizaban dejaban ese tipo de color. Existían pinturas negras para el rabillo del ojo, criticado en diversos textos religiosos.
Hombres: buscaban mantener una imagen de juventud y virilidad, remedios para la calvicie y teñían sus canas.
Renacimiento:
Es el resurgir de una época que comienza en el siglo XV y se extiende hasta finales del XVI.
Fue un periodo de transición entre la Edad Media y los inicios de la Edad Moderna. Sus principales exponentes se hallan en el campo de las artes, aunque también se produjo una renovación en las ciencias, tanto naturales como humanas. La ciudad de Florencia, en Italia, fue el lugar de nacimiento y desarrollo de este movimiento, que se extendió después por toda Europa.
El Renacimiento fue fruto de la difusión de las ideas del humanismo, que determinaron una nueva concepción del hombre y del mundo. El término «renacimiento» se utilizó reivindicando ciertos elementos de la cultura clásica griega y romana, y se aplicó originariamente como una vuelta a los valores de la cultura grecolatina y a la contemplación libre de la naturaleza tras siglos de predominio de un tipo de mentalidad más rígida y dogmática establecida en la Europa medieval.
Un despertar que te cuento más en detalle el el siguiente artículo:
Historia del maquillaje – Siglos XVI XVII XVIII
Gracias por leerme!
Un brazo,
Janire.
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